Deterioro
AFGANISTÁN: Se recrudece el conflicto, mientras los talibán se dividen y Estado Islámico adquiere mayor protagonismo
Fuentes militares norteamericanas anuncian el desmantelamiento del que probablemente sea el campo de entrenamiento más grande de al-Qaeda. El campo, situado en el distrito de Shorabak de la provincia de Kandahar, tiene 77,7 km2. La pérdida de territorio a manos de los talibán en algunos distritos es pareja a la recuperación de otros. En Helmand, una ofensiva de varios meses de duración enfrenta a las fuerzas afganas y talibán por el control de los distritos de Marjah y Nad-e-All, donde han muerto más de 200 talibán y 85 soldados, según el gobierno provincial. En Kunduz, las Fuerzas afganas han recuperado una base en el distrito de Dasht-e-Archi pero han perdido un distrito en la provincia de Badakhsan. Fuentes gubernamentales afirman que, junto a los talibán, más de 1.300 insurgentes extranjeros (pakistaníes, tayikos y uigures, entre otros) participan en la batalla de Kunduz. Por otra parte, en Nangarhar, donde hay un grupo leal al Estado Islámico (EI), más de 30 insurgentes han muerto por ataques de aviones no tripulados. En esta provincia, el Gobierno local afirma que alrededor de 200 estudiantes de la universidad están ligados a grupos insurgentes. De hecho, en una manifestación antigubernamental, se exhibieron banderas del EI. En Zabul, el EI ha ejecutado a siete miembros de la etnia hazara (de confesión chií) que secuestró en septiembre. Entre ellos, hay tres mujeres, las primeras en ser víctimas de un degollamiento. Los familiares han llevado los cadáveres de los fallecidos a Kabul, a los que se unieron miles de personas (20.000 según algunos medios), en una de las mayores protestas vistas en la capital. Los manifestantes han intentado entrar en el palacio presidencial pero han sido repelidos por disparos de la Policía. Sin embargo, los secuestros de estas personas son habituales. En febrero, 31 hazaras fueron secuestrados, y este mes, tras la manifestación en Kabul, han sido 20, una vez más, en Zabul. El EI aumenta su influencia, en parte gracias a los enfrentamientos entre los talibán. En Zabul, el Mullah Rasool Akhund ha sido elegido líder de una facción talibán opuesta a la liderada por el Mullah Akhtar Mansoor. Esta facción talibán lucha junto al EI (compuesto fundamentalmente por miembros del Movimiento Islámico de Uzbekistán). Como resultado de esta división, un conocido dirigente del nuevo grupo, Mullah Mansoor Dadullah, ha sido asesinado por un talibán fiel a Akhtar Mansoor. En relación con el proceso de reconciliación con el Gobierno, el grupo de Akhtar Mansoor ha nombrado como portavoz de la oficina política de Qatar a un veterano talibán que ha participado en varias rondas de diálogo, Sher Mohammad Abbas Stanekzai. Sin embargo, el Gobierno afgano se muestra reticente a volver a dialogar. Por otra parte, en la provincia de Ghor, controlada por los talibán, una mujer ha sido condenada por un tribunal tribal a ser lapidada. (The Washington Post, 31/10/15, 08/11/15; Al Jazeera, 4/11/15; ToloNews, 05-24/11/15; The New York Times, 25/11/15)