El 8 de octubre ha sido asesinado en la capital Maputo, Jeremias Pondeca, miembro del equipo de negociación de la Renamo en las conversaciones de paz. El asesinato ha sido duramente condenado por la Renamo, así como también por las instituciones del Gobierno, el propio presidente Filipe Nyusi y la Unión Europea, y ha hecho que el equipo de mediadores internacionales pospusiera las conversaciones de paz. Estas se han reanudado el día 18, con conversaciones separadas entre el Gobierno y el grupo opositor Renamo, y han contado con la unión al equipo de mediadores internacionales del ex presidente de Tanzania, Jakaya Kikwete. Sin embargo, el día 28 las conversaciones han sido nuevamente suspendidas y pospuestas hasta el 10 de noviembre, debido a los enfrentamientos armados que se han generado en algunos puntos de la zona central país. Mario Raffaelli, coordinador del equipo internacional de mediación y representante de la Unión Europea, ha afirmado que han propuesto a las delegaciones del Gobierno y la Renamo el envío al Parlamento (Asamblea de la República) de un conjunto de puntos sobre la descentralización, así como también una hoja de ruta para tratar los otros puntos de la agenda de las negociaciones (AFP, 10/10/2016; AIM, 19, 29/10/2016; Africa Confidencial, 21/10/2016)

Las posibilidades de reactivar un diálogo político formal para abordar el conflicto armado en Siria se ven mermadas por la intensificación de las hostilidades, en especial por la violencia en Alepo que causó centenares de víctimas mortales en el mes de octubre. Ante la evolución de los acontecimientos, a principios de septiembre EEUU decidió suspender las conversaciones con Rusia sobre el cese de hostilidades y también el acuerdo de cooperación militar para el combate a ISIS y Jabhat Fateh al-Sham suscrito el mes pasado. Pese a esta decisión, 12 días después, a mediados de mes el secretario de Estado de EEUU celebró una reunión en Lausanne (Suiza) con el ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, además de los representantes de países de Oriente Medio: Arabia Saudita, Irán, Turquía, Qatar, Jordania y Egipto. Se trata de un grupo reducido respecto al que integra el Grupo Internacional de Apoyo a Siria, que incluye a países europeos. Cabe destacar que la presencia de Egipto fue solicitada por Irán, en lo que medios de prensa interpretaron como una señal de los cambios en las alianzas en Oriente Medio. La reunión en Lausanne, sin embargo, acabó sin resultados o acuerdos concretos. A lo largo del mes, EEUU y Reino Unido exigieron un cese de hostilidades como condición para recuperar las conversaciones. A finales de octubre, tras la intensificación de la campaña de grupos armados de la oposición sobre la zona oeste de Alepo controlada por el régimen –con ofensivas que afectaron a la población civil y que, según la ONU, podrían constituir crímenes de guerra–, Rusia aseguró que las conversaciones de paz sobre el destino de Alepo quedaban suspendidas indefinidamente. (The Guardian, 14, 15, 20/10/16 y 01/11/16; ICG, 01/11/16)

En medio de un deterioro de los niveles de violencia y la situación humanitaria, a finales de octubre la ONU promueve un nuevo plan de paz para dar una salida política al conflicto yemení. Los detalles de la hoja de ruta no se hicieron públicos, pero informaciones de prensa apuntaron que la propuesta incluye el nombramiento de un nuevo vicepresidente después de la retirada de los al-houthistas de Sanaa y otras ciudades y la entrega de armas pesadas a una tercera parte. Tras esta designación, el presidente Abdo Rabbo Mansour Hadi –actualmente en el exilio en Arabia Saudita– transferiría el poder al nuevo vicepresidente, quien a su vez nombraría un primer ministro para formar un gobierno con representación equitativa del norte y sur de Yemen. Tras reunirse en Riad con el enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Ould Cheikh Ahmed, Hadi rechazó este plan asegurando que premiaba a las fuerzas golpistas lideradas por los al-houthistas. El mandatario, depuesto por los al-houthistas en alianza con sectores leales al ex presidente Alí Abdullah Saleh a principios de 2015, ha insistido en reiteradas ocasiones en que la solución al conflicto yemení debe basarse en la resolución 2216 aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU en abril de 2015. Según trascendió, los al-houthistas y sus aliados aceptaron con condiciones la nueva propuesta de la ONU como base para reanudar el diálogo. EAU, país que forma parte de la coalición militar liderada por Arabia Saudita que apoya a Hadi, valoró positivamente esta nueva hoja de ruta como vía política para abordar la crisis en Yemen. Informaciones de prensa subrayaron que en agosto el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, presentó una propuesta similar a la impulsada ahora por la ONU, ya que también ofrecía a los al-houthistas participar en el gobierno a cambio de poner fin a la violencia y entregar armas a una tercera parte. Según declaró entonces Kerry, los Estados del Golfo estaban de acuerdo con esta iniciativa. (AFP, Middle East Eye y The National, 29/10/16)

Los presidentes de Armenia y Azerbaiyán reafirman su apoyo a la ampliación de la Oficina del Representante de la presidencia de turno de la OSCE, incrementando el número de observadores internacionales, pero sin concreción todavía. La decisión de respaldo a una expansión de la Oficina del Representante fue tomada en las cumbres presidenciales de Viena y San Petersburgo, de mayo y junio, respectivamente. La nueva afirmación de ese acuerdo se produjo durante la visita a finales de octubre de los co-presidentes del Grupo de Minsk de la OSCE a la región, durante la cual mantuvieron reuniones separadas con los presidentes armenio y azerbaiyano, sus ministros de Exteriores y el nuevo ministro de Defensa armenio. No obstante, las conversaciones sobre los detalles operativos de la futura ampliación continúan sin concreción definitiva todavía. Los co-mediadores abordaron también en su visita la situación de seguridad en la zona de conflicto, tras los incidentes de violencia de abril, los más graves desde el fin del conflicto a mediados de los años noventa. Además, se reunieron con el CICR en torno a su trabajo sobre el intercambio de información sobre las personas desaparecidas entre las partes en conflicto. (OSCE, 26/10/16)

El plebiscito convocado para el 2 de octubre por el Gobierno y las FARC, para que la ciudadanía colombiana refrendase en las urnas el acuerdo de paz alcanzado para terminar con 52 años de conflicto armado, se ha resuelto con el rechazo del acuerdo. El “no” ha obtenido la victoria ajustada con el 50,21% (6.431.376 votos) frente al 49,78% (6.377.482 votos) que obtuvo el “sí”, en una consulta cuya abstención estuvo en el 60% del censo electoral. Tras darse a conocer los resultados, el presidente colombiano Juan Manuel Santos, ha reafirmado su compromiso con la paz y ha realizado un llamamiento al dialogo con todas las partes para renegociar el acuerdo. Santos ha manifestado que el alto el fuego decretado con las FARC, en vigor desde el pasado 29 de agosto, se mantendrá hasta el 31 de octubre, fecha que posteriormente ha sido ampliada hasta el 31 de diciembre. Por su parte El máximo líder de las FARC, Timoleón Jiménez, alias “Timochenko”, ha afirmado desde La Habana que las FARC mantendrán “su voluntad de paz” “y su disposición de usar solamente la palabra como arma de construcción hacia el futuro”. Los partidarios del acuerdo de paz han realizado marchas en Bogotá y otras ciudades el 5 y 12 de octubre pidiendo un rápido acuerdo de paz con las FARC. El 4 de octubre, las FARC y el equipo negociador del Gobierno se han vuelto a sentar en La Habana para retomar el acuerdo. El jefe negociador del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle Lombana, ha puesto su cargo a disposición del presidente, quien lo ha ratificado en el cargo y nombrado, junto con los ministros de Relaciones Exteriores y de Defensa, interlocutor con la oposición dirigida por el expresidente Álvaro Uribe -líder de la campaña por el “no”. Las conversaciones entre el gobierno y las FARC han continuado durante todo el mes, dando lugar a un comunicado el 28 de octubre que ha destacado la voluntad de encontrar una solución. Paralelamente, Santos ha sido galardonado con el premio Nobel de la Paz 2016 por sus “decididos esfuerzos” por llevar la paz a su país, según ha anunciado en Oslo el Comité Nobel de Noruega. El galardón ha sido recibido por los partidarios del “sí” como un impulso en la construcción de la paz. Por otro lado, la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Gobierno colombiano, y tras meses de negociaciones, han anunciado el inicio de conversaciones formales de paz, en su fase pública, en Ecuador. Las conversaciones empezaran el 3 de noviembre, luego de haber sido suspendidas el 27 de octubre, debido a que el Gobierno le ha exigido al ELN la liberación del ex congresista Odín Sánchez Montes de Oca, secuestrado hace seis meses, como condición para iniciar el dialogo. El exministro colombiano, Juan Camilo Restrepo, quien ha sido designado jefe del equipo negociador del Gobierno en los diálogos de paz con el ELN, ha afirmado que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha comenzado el operativo para la liberación del ex congresista. El ELN ha reseñado también en su cuenta de Twitter, las 18 personas (12 hombres y 6 mujeres) que compondrán su equipo negociador, encabezado por Israel Ramírez Pineda, alias “Pablo Beltrán“. (Efe; 2-5,10, 14, 24, 26-27/10/2016)

La Consejera de Estado, Aung San Suu Kyi, ha hecho un llamamiento a los grupos armados de oposición que no han firmado el acuerdo de alto el fuego nacional para que lo hagan antes del mes de febrero, cuando está previsto que se celebre la siguiente sesión de la Conferencia de Paz, Panglong-21. La firma del acuerdo de alto el fuego es una condición establecida por el Ejército para participar en el proceso de diálogo político. Aunque la coordinadora de grupos armados no firmantes del acuerdo, UNFC, solicitó participar en el proceso político sin necesidad de adherirse al acuerdo de alto el fuego, esta petición fue rechazada. El llamamiento de Suu Kyi se produjo durante el transcurso de una reunión del Comité Conjunto para el Diálogo de Paz de la Unión, que une a Gobierno, insurgencia y militares y que está presidido por Aung San Suu Kyi, con el objetivo de coordinar el diálogo político acerca de una posible reestructuración de carácter federal en el país. Suu Kyi habría pedido a los grupos armados que lleven a cabo más iniciativas de construcción de confianza entre las diferentes insurgencias. El Gobierno estaría preparando un encuentro de carácter político para el mes de noviembre, al que, de acuerdo con los términos del acuerdo de alto el fuego, solo podrían asistir los ocho grupos armados firmantes de dicho acuerdo. El diálogo se producirá a nivel regional en los estados en los que tienen sus bases los grupos firmantes del acuerdo de alto el fuego, lo que representa una importante expansión del proceso de paz, aunque se excluirán las zonas en las que operan los grupos no integrados en el acuerdo. Dirigentes de grupos armados como el KIA o el KNPP, integrantes del UNFC, han señalado que no pueden firmar el acuerdo de alto el fuego, puesto que persisten los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. (The Irrawaddy, 21, 28 y 31/10/16)

El Gobierno y parte de la oposición política que ha participado en el Diálogo Nacional promovido por el Gobierno para intentar superar la situación de estancamiento y crisis actual acuerdan el 17 de octubre un nuevo calendario electoral que pospone hasta abril de 2018 las elecciones presidenciales, lo que significa que el actual presidente Joseph Kabila permanecería en el poder hasta que un nuevo presidente fuera investido, a pesar de que su mandato debería finalizar el próximo diciembre de 2016. El acuerdo fue anunciado después de que la UE amenazara con el establecimiento de sanciones si no se celebraban elecciones en 2017. Así, las elecciones presidenciales, legislativas y locales se celebrarán seis meses después de lo convenido, el 30 de octubre de 2017, según ha señalado el antiguo primer ministro de Togo, Edem Kodjo, que ha facilitado las conversaciones celebradas en Kinshasa en nombre de la UA. Así, las elecciones tendrán lugar el 29 de abril y la transferencia de poder al nuevo presidente será el 9 de mayo. Según el acuerdo, el negociador Edem Kodjo añadió que un nuevo Gobierno deberá ser formado con el cargo de primer ministro en manos de una figura de la oposición. El líder opositor Vital Kamerhe, quien fue director de campaña de Kabila y fue expulsado del partido en 2008 cuando era portavoz en el Parlamento, es la figura que se perfila a ocupar ese cargo. La principal coalición opositora, Rassemblement, había boicoteado las conversaciones de paz, y había recordado que no aceptaría ninguna decision anunciada por los representantes del diálogo. Uno de los líderes de Rassemblement, Étienne Tshisekedi (partido UDPS) manifesto su rechazo al acuerdo. A la vez, hicieron un llamamiento a celebrar una huelga general el 19 de octubre en rechazo del acuerdo ya que viola la Constitución congolesa. La protesta también iba dirigida contra Kodjo, acusándolo de favorecer al presidente. La huelga fue seguida mayoritariamente en Kinshasa y en otras ciudades del este, pero en otras partes como Lumumbashi y Kisangani no tuvo repercusión. El ministro francés de Exteriores, Jean-Marc Ayrault, destacó que el aplazamiento de las elecciones no era la respuesta adecuada a la crisis actual, ya que la única manera de salir de la crisis es que Kabila anuncie que no volverá a presentarse a las elecciones y que se proponga un calendario electoral. La SADC UA, ONU y la Conferencia Interancional de la Región de los Grandes Lagos han apoyado el acuerdo, mientras que la poderosa Iglesia Católica ha anunciado que lo rechazaba. (The Guardian, 19/10/16; Bloomberg, AFP y PANA, 21/10/16)

El Gobierno y MARA Patani, que negocia en nombre de varios grupos insurgentes que operan en el sur del país, celebraron una nueva ronda de conversaciones exploratorias en Kuala Lumpur (Malasia) los días 25, 26 y 27 de octubre, con la facilitación del Gobierno de Malasia. No se registraron acuerdos significativos, aunque ambas partes se conminaron a seguir dialogando (sin que trascendiera la fecha de la siguiente reunión) y reconocieron haber discutido acerca de la propuesta de crear zonas de seguridad como medida para crear confianza entre las partes. El jefe del panel gubernamental, el general Aksara Kerdpol, declaró que en las siguientes rondas de negociación se definirán las mencionadas zonas de seguridad, tanto a nivel comunitario como a nivel de distrito. Por su parte, el portavoz de MARA Patani, Abu Hafiz al-Hakim, declaró que actualmente el país entero se hallaba de duelo y señaló que seguirán a la espera de las propuestas del Gobierno una vez finalice el periodo de duelo por la muerte del rey Bhumibol Adulyadej el 13 de octubre. En este sentido, el Gobierno pidió a los grupos insurgentes una pausa en las hostilidades, por considerar que el rey era una figura bien valorada por todas las confesiones religiosas del país, pero desde entonces se han seguido registrando episodios de violencia. La anterior ronda de conversaciones exploratorias, que se llevó a cabo en Kuala Lumpur a finales de septiembre, también finalizó sin acuerdos importantes, aunque ya entonces MARA Patani se comprometió a estudiar la propuesta de Bangkok sobre la creación de una zona de seguridad o de alto el fuego para que se pueda demostrar si MARA Patani tiene algún tipo de control sobre los niveles de violencia en el sur del país y también declaró estar abierta a recibir propuestas sobre la creación de zonas de seguridad por parte de organizaciones de la sociedad civil. (The Sun Daily, 25/10/16; Benar News, 26 y 28/10/16; ABC Online, 03/10/16)

El Gobierno afgano y representantes talibanes ha reiniciado las conversaciones de paz en Qatar, según han revelado fuentes talibanes a medios de comunicación occidentales, aunque no se trata de un proceso de negociaciones oficiales. Varios miembros de la comisión política talibán en Qatar se habrían reunido en dos ocasiones, en septiembre y octubre, en Doha con el jefe de los servicios de inteligencia afganos, Mohammed Masoom Stanekzai, y en presencia de un diplomático de alto rango estadounidense. Estos encuentros se celebraron sin la asistencia de representantes pakistaníes, lo que mostraría el distanciamiento tanto de los talibanes como del Gobierno afgano con el país vecino, aunque posteriormente, tres representantes talibanes se desplazaron a Pakistán. Las reuniones en Doha son las primeras celebradas desde que se rompiera el proceso de paz auspiciado por Pakistán tras el asesinato del líder talibán Mullah Mansoor por un drone estadounidense. El Gobierno afgano negó tener conocimiento de este encuentro y la Embajada estadounidense en Qatar declinó hacer comentarios sobre las reuniones. No obstante, la presencia diplomática estadounidense en estas reuniones habría servido para relanzar el proceso, ya que los talibanes se han negado en numerosas ocasiones a reunirse solo con el Gobierno afgano, por considerarlo un gobierno títere y han destacado la importancia de que las negociaciones se produzcan a tres bandas. En el encuentro posterior mantenido por los representantes talibanes con el Gobierno pakistaní, éste último habría tratado de relanzar un proceso de diálogo entre talibanes y Gobierno afgano liderado por Pakistán. Todos los intentos de relanzar el proceso de paz se producen en un contexto de fuertes divisiones internas en el seno de la organización talibán acerca de la conveniencia o no de negociar con Afganistán, así como sobre el papel que debe jugar Pakistán. Algunos líderes talibanes, entre ellos el hasta ahora principal negociador Sayed Muhammad Tayeb Agha, se habrían mostrado favorables a distanciarse de Pakistán e incluso a que la dirigencia abandonara el país, en el que reside abiertamente. Por otra parte, las relaciones entre Afganistán y Pakistán se han deteriorado notablemente de manera reciente y el Gobierno afgano acusa a Pakistán de estar detrás de los recientes éxitos militares de la insurgencia. (The New York Times, 31/10/16; The Guardian, 18 y 21/10/16)

La ONU anuncia en octubre la decisión de los líderes de abordar el capítulo sobre territorio a través de un retiro a Mont Pelerin (Suiza) entre el 7 el 11 de noviembre, donde también abordaron otras cuestiones pendientes. Ambos líderes expresaron su intención de que las negociaciones en Suiza allanen el camino para la última fase de las negociaciones, en el marco de su intención de alcanzar un acuerdo en 2016. Los líderes de las comunidades grecochipriota y turcochipriota prosiguieron en octubre con su calendario intensificado de rondas negociadoras de octubre, en que han abordado cuestiones referidas a economía, gobernanza, reparto de poder y asuntos de la UE. El líder turcochipriota, Mustafa Akıncı, señaló que se podría celebrar un referéndum hacia mediados de 2017, usándose los primeros meses de 2015 para elaborar una constitución, leyes federales y otras cuestiones técnicas así como para que haya tiempo suficiente para la movilización de la opinión pública. No obstante, son diversas las voces que han cuestionado las posibilidades de alcanzar un acuerdo final antes de finales de año, dadas las cuestiones aún pendientes. (ONU, Hürriyet, 1-31/10/16)

Finaliza en Oslo la segunda ronda de conversaciones formales entre el Gobierno y el NDF, en la que ambas partes reafirmaron su intención de firmar un acuerdo de paz para agosto de 2017 y avanzaron simultáneamente en la discusión sobre los tres puntos de la agenda sustantiva: reformas económicas y sociales, reformas políticas y constitucionales y fin del conflicto. Además, ambas partes se comprometieron a tener listo para finales de octubre un borrador de acuerdo de cese de hostilidades bilateral, que debería sustituir a los dos alto el fuego unilaterales indefinidos que firmaron ambas partes a finales de agosto. Según el Gobierno, la nueva modalidad de alto el fuego bilateral debería contemplar la supervisión conjunta del cese de hostilidades e incluso incorporar a una tercera parte a dichas tareas. Cabe destacar que una delegación de seis miembros de la Cámara de Representantes asiste a las reuniones entre el Gobierno y el NDF en calidad de tercera parte observadora. Finalmente, el Gobierno declaró tener listo un borrador de amnistía que incluiría a unas 400 personas, una cifra ligeramente inferior a las más de 500 personas que pide el NDF. Por otra parte, pocas horas antes del inicio de estas nuevas conversaciones de paz, el NDF anunció la renuncia de Luis Jalandoni como presidente del panel negociador y su sustitución por el hasta el entonces vicepresidente del panel, Fidel Agcaoli. Cabe recordar que el pasado mes de mayo Agcaoli se reunió en Davao con el nuevo presidente, Rodrigo Duterte, solamente una semana después de que éste fuera elegido, para abordar el futuro de las conversaciones de paz. Días antes de esta reunión, el propio Duterte había ofrecido al NDF cuatro ministerios en su Gobierno (Medio Ambientes y Recursos Naturales; Reforma Agraria; Bienestar Social y Trabajo y Empleo) y había mostrado su disposición a iniciar un diálogo con el líder y fundador del CPP y el NPA, Jose Maria Sison, tanto viajando él a Utrecht, ciudad en la que residen desde hace años tanto Sison como el propio Agcaoli, como garantizando su seguridad e inmunidad en un eventual regreso a Filipinas. Tras la reunión con Duterte en mayo, Agcaoli se mostró optimista respecto del proceso de paz y declaró que el NDF no había puesto ninguna precondición para la reanudación del diálogo. De igual modo, en esta segunda ronda de negociaciones formales, el NDF anunció la incorporación de Benito Tiamzon al panel negociador, que jamás había sido modificado desde su establecimiento en 1992. En la anterior reunión, que tuvo lugar en Oslo a finales de agosto, el Gobierno y la Corte Suprema ya habían autorizado la liberación temporal de 20 prisioneros del NDF para que formaran parte de la delegación que viajó a Oslo. Entre las personas que obtuvieron dicha liberación temporal se hallaban Benito Tiamzon y Wilma Tiamzon, los dos principales líderes del NPA y el CPP en Filipinas. En esta misma reunión de finales de agosto en Oslo, el Gobierno y el NDF se comprometieron acelerar el ritmo del proceso de paz y a firmar un acuerdo de paz en un período de un año, lo que otorgaría al Gobierno de Duterte un plazo de cinco años para implementar dicho acuerdo. Además, tras la reunión ambas partes firmaron un acuerdo de alto el fuego indefinido, el primero de estas características en tres décadas. El Gobierno y el NDF también acordaron firmar en seis meses el acuerdo sobre reformas económicas y sociales (CASER, por sus siglas en inglés, considerado por muchos analistas como el punto más importante de la agenda sustantiva) y renovaron el acuerdo sobre garantías de seguridad e inmunidad (JASIG, por sus siglas en inglés), el aspecto que en los últimos años ha generado mayor controversia entre las partes y que provocó el bloqueo del proceso de paz durante las conversaciones con el anterior Gobierno de Benigno Aquino. (Inquirer, 08/10/16; Manila Times, Rappler, 09/10/16; GMA News, Inquirer, InterAksyon, 05/10/16; Minda News, 04/10/16; Davao Today, 06/10/16)

Los líderes de Rusia, Ucrania, Alemania y Francia celebran una nueva cumbre del formato negociador de Normandía y acuerdan elaborar una nueva hoja de ruta para finales de noviembre, con el fin de impulsar la implementación del acuerdo de paz de Minsk. Los líderes alcanzaron acuerdos preliminares sobre nuevas zonas de desmilitarización y sobre el despliegue de una misión de policía armada de la OSCE. Según el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, se acordaron cuatro nuevas zonas en las que proceder a la separación de fuerzas. El portavoz presidencial ruso afirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, respondió con una posición de consenso potencial a la propuesta de una misión policial armada, que sin embargo es rechazada por los representantes de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk. En todo caso, el Kremlin señala que la OSCE aún no ha desarrollado la idea de la misión y que ésta podría tardar en concretarse. Por otra parte, a finales de noviembre, el representante de la OSCE en el Grupo Trilateral de Contacto, Martin Sajdik, confirmó que se habái implementado la separación de fuerzas en Zolote y Petrivske y que seguían las discusiones para la desmilitarización en Stanytsia Luhanska –la tercera de las tres zonas iniciales del acuerdo de desmilitarización pactado en septiembre– y en nuevas áreas. (OSCE, Reuters, Itar Tass, RFE/RL, 1-31/10/16)