Por Marc Ferrà, con entrevista a Josep Maria Royo. ARA Balears
La ruta migratoria entre las costas argelinas y Baleares está en constante transformación. Más allá del aumento de llegadas en el último lustro, también ha crecido la peligrosidad de la travesía; ha cambiado el perfil de las personas que llegan, los motivos que les empujan y la respuesta de las autoridades. Lo que empezó en el 2018 como un goteo puntual de personas que atravesaban de un país vecino a otro, ahora se ha convertido en una ruta establecida, una de las más importantes del Mediterráneo, a través de la que salen personas que su camino comienza a miles de kilómetros de nuestras costas.